Tamariu

Antiguamente, las casas de Tamariu eran casas modestas, principalmente de planta baja y dedicadas a la pesca. Poco a poco la pesca se cambió por el turismo, pero la población todavía conserva el encanto de estos pequeños pueblos mediterráneos, abocados al mar y en cierto modo ajenos al ritmo de vida actual.

A pesar de que la edificación se encuentra aparentemente en buen estado, y está en condiciones de ser habitable, su configuración no responde al estilo de vida de los nuevos propietarios, razón por la cual se propone su remodelación integral.

Se propone una reforma que recupere la autenticidad de la casa de pueblo y que valore la singularidad de cada espacio en contraposición a la repetición característica de un bloque de pisos.

Se remodela la fachada y sus aperturas, manteniendo los ejes verticales, como marca la normativa, pero evitando la uniformidad de los agujeros.
Se configuran los detalles de fachada con criterios puristas y minimalistas e introduciendo los materiales naturales propios de las construcciones tradicionales.

Se proponen modificaciones en la distribución interior para adecuarse a los requerimientos funcionales de los nuevos propietarios.